Dijous 24 de Novembre
Salm 46
Dios es
nuestro refugio y fortaleza,
socorro
siempre a punto en la angustia.
Por eso
no tememos aunque tiemble la tierra
y los
montes se hundan en el fondo del mar.
Aunque
bramen y se agiten sus aguas,
y con
su oleaje sacudan los montes.
El salmo 46 es un salmo de
confianza donde los haya. Es la confianza en el Señor en medio de las
situaciones más calamitosas. El salmista usa dos imágenes extremas, la tierra,
a pesar de su firmeza temblando, y el mar llegando hasta los montes y
sacudiéndolo todo. A pesar de todo, él continuará confiando en el Señor que es
descrito como fortaleza, alcázar, baluarte. Por cuatro veces en tan pocos
versículos se repite esta idea y en tres se añade, el Señor todopoderoso
está con nosotros.
Debido a que el Señor
todopoderoso está con nosotros y a su carácter de poderosa fortaleza, por eso
no tememos sean cuales sean las circunstancias que enfrentamos.
Este salmo ha inspirado a
muchos creyentes a afrontar situaciones, desafíos y circunstancias que iban
mucho más allá de sus fuerzas. Fue precisamente este salmo el que dio fuerzas a
Martín Lutero cuando fue a enfrentarse, sólo, sin armas ni ejército, a las dos
fuerzas más importantes de su tiempo, el imperio español y la iglesia católica.
Por eso no tuvo temor.
Para mí la lección del salmo
es clarificar mis desafíos, ser realista con respecto a ellos, no quitarles
importancia, no minimizarlos, verlos en su dimensión real y, una vez hecho eso,
afirmar que contra todo eso nuestro Dios es una fortaleza todopoderosa y, por
tanto, no temeré, antes bien me refugiare en Él.
Un principio
Aunque..... no temeremos.
Una oración
Señor, estos son
los desafíos que afrontamos pero, a pesar de todo, no temeremos sino que descansaremos
en ti.
Cap comentari:
Publica un comentari a l'entrada